domingo, 4 de agosto de 2013

Llamada de dolor.

Cuantas veces he soñado con despertarme un día y no sentir dolor; ver el amanecer sin sufrir herida alguna, pero por desgracia en la vida real el dolor forma parte de cada ser vivo, y el miedo se encuentra en cada rincón de este pequeño cuerpo, una pequeña soñadora con miedo a soñar. ¿Dónde se ha visto esto? En mi vida, cualquier sueño se convierte en una amarga pesadilla.
Poco a poco el día pasa y la oscuridad se vuelve una forma de vida para el dolor y solo deseo que el amanecer recobre ese color anaranjado para tener menos miedo ha esta vida que no me deja terminar de soñar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario